Mientras los gobiernos nacional y regional confían destrabar la III etapa de Chavimochic a partir del próximo resultado del laudo arbitral que puede extender su cumplimiento unos cinco años, por su parte, los empresarios de Chavimochic proponen aplazar el laudo para ponerse de acuerdo con la misma concesionaria a fin de que en solo seis meses se retome la ejecución de la presa Palo Redondo.
26 de setiembre de 2021
En el presente informe detallamos el proceso que viene siguiendo la hoy entrampada ejecución de la tercera etapa del Proyecto Especial Chavimochic, el tiempo que lleva paralizada, cuántos puestos de trabajo se ven comprometidos por esta situación, y el riesgo de disminución en la captación de agua.
Para analizar la situación actual, sus beneficios, complicaciones y posibles soluciones, es necesario un repaso de su reciente historia.
La génesis de Palo Redondo
Chavimochic es un proyecto hidroenergético que gestiona recursos hídricos para su uso agrícola, energético y poblacional. Con ello se promueve la incorporación de áreas nuevas y el desarrollo de una agricultura sostenible en el área de influencia. Este proyecto lleva el nombre de los valles que recorre: Chao, Virú, Moche y Chicama.
La ejecución de su tercera etapa, cuya obra central es la Presa Palo Redondo, fue concesionada en 2013 a la empresa brasileña Odebrecht.
El 21 de diciembre del 2016 una corte neoyorquina anunció que los altos funcionarios de la Odebrecht confesaron haber pagado 29 millones de dólares en sobornos para hacerse con diversas obras a lo largo y ancho del Perú (incluyendo la confesión de haber financiado, de manera subrepticia, diversas campañas electorales en el país).
Tras ello, se suspendieron en el Perú todas las acciones de la empresa caída por corrupción, así también se suspendió su labor en Chavimochic. Y Palo Redondo quedó en abandono a pesar de su avance de obra de un 70%.
La tercera etapa de Chavimochic escaló al ámbito jurídico y se encuentra en un laudo arbitral en la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil (CNUDMI), ya que tanto el concesionario como el gobierno regional solicitaron “la caducidad del contrato”.
Un laudo arbitral es, en resumidas cuentas, un mecanismo al que recurren dos partes de un conflicto para lograr solución mediante un tercero, el árbitro, quien dará solución definitiva del conflicto.
Los árbitros son los responsables de resolver, mediante la emisión de un laudo, el conflicto jurídico sometido a su decisión.
Novonor
Odebrecht, la empresa emblema de la corrupción a lo largo del continente, no existe más.
Tras la presión y el cierre de brechas laborales y económicas en varios de los países en los que operaban, se vio obligada a vender sus acciones, contratos, instalaciones y todo lo que era parte de la firma creada en 1944. Ahora es “Novonor”, ese es el nombre con el que operan, aunque con nuevos funcionarios, mantienen los contratos obtenidos como Odebrecht antes de fenecer formalmente.
Posición del Gobierno Regional
El Gobernador Regional de La Libertad, Manuel Llempén, señaló a Investiga que en coordinación con el Ministerio de Agricultura están trabajando, a la par que se resuelve el proceso de arbitraje, en el diagnóstico de la zona de operaciones de la presa.
“Hemos formado una comisión para, en coordinación con el Ministerio de Agricultura, no esperar el laudo arbitral. Ya en este momento estamos haciendo el diagnóstico de cómo se encuentra la obra de Palo Redondo. En estos días o la próxima semana, a más tardar, ya se estaría dando la buena pro (desde Ministerio de Agricultura) para la contratación de los seguros del riego constructivo”, manifestó Llempén.
Llempén Coronel también informó que el resultado final del laudo se conocería en los “fines de noviembre, a más tardar”. Sin embargo, explica que de seguir este proceso (esperar el final del laudo y ejecutar sus procesos), el reinicio de las obras no sería inmediato porque “esto comienza nuevamente de cero. “Acá se tiene que hacer el expediente técnico de lo que falta y eso nos va a llevar un poco de tiempo”, sostuvo.
Es decir, de ahí (resultado de laudo) en adelante se tiene que realizar una auditoría para conocer y dejar constancia de la situación de las maquinarias y equipos ubicados en el mega reservorio que lleva paralizado ya cinco años. También se deberá contratar a una empresa para que se encargue de los estudios de diagnóstico y tener conocimiento de la situación actual de las 30 mil hectáreas de extensión que comprende Palo Redondo.
¿La solución Inmediata?
El último viernes en la Cámara de Comercio y Producción de La Libertad se desarrolló un encuentro informativo con la participación de todos los actores que buscan el destrabe de inversiones y obras en la III etapa de Chavimochic.
En esa reunión Juan Rodolfo Wisner Rico, presidente de la Asociación para el Desarrollo Agropecuario Sostenible (integrada por exportadores y propietarios de terrenos de Chavimochic, que además exigen tener presencia en la mesa de trabajo que busca solución), expuso una propuesta que permitiría retomar las obras en Palo Redondo en un plazo máximo de seis meses.
En declaraciones para Investiga, Wisner detalló que su pedido consiste en “aplazar el laudo arbitral entre 90 o 120 días para que en ese plazo pueda tomarse un acuerdo entre ellos dos (concesionaria y Estado Peruano) de poder reactivar el proyecto con el mismo concesionario (Novonor), que hoy ya ha sufrido un cambio de propiedad, de personas, y es otra empresa realmente”.
Wiesner Rico agrega que si bien hay una “imagen negativa por parte de los concesionarios anteriores (Odebrecht) “es necesario” superar las dificultades y llegar a un acuerdo”. Pero si no se llegara a un convenio en el plazo estimado “se tendrá que recibir el laudo arbitral y caminar por esas fases que nos van a demorar tres o cinco años más”.
El también CEO del grupo agroindustrial Arato explica que con la sugerencia extendida al grupo parlamentario regional “en seis meses podría reactivarse la construcción y la finalización de la presa podría estar terminada en un año o año y medio. Por eso hay que escoger si nos vamos por el camino del año y medio o nos vamos por los cinco años”.
El representante de los empresarios de Chavimochic sostiene su planteamiento en que “la tercera etapa es prácticamente una copia de la primera y de la segunda”. Con ello la tercera etapa generaría exportaciones valorizadas en 1 500 millones de dólares desde el inicio de su funcionamiento.
“En el aspecto laboral beneficiará directamente a 120 mil trabajadores. Al contar los proveedores externos se estaría hablando de medio millón de empleos formales, actividad comercial, pago de IGV. Formalización a todo nivel”, agrega Wiesner, quien además sostiene que el beneficio se extiende a “diez mil pequeños productores que se benefician del agua constante del proyecto 1 y 2. Diez mil familias, 50 mil personas beneficiadas”.
¿Cuál es el riesgo si se espera el proceso arbitral?
Chavimochic tiene como finalidad captar aguas de la Margen Derecha del Río Santa para lograr la regularización de riego de los Valles Chao, Virú, Moche y Chicama. Ad portas de cumplir el primer lustro de inoperatividad en Palo Redondo, los empresarios privados evalúan una desventaja cada vez más cercana: el riesgo de que el agua comience a faltar en Chavimochic como consecuencia del calentamiento global.
Opiniones parlamentarias
La flamante bancada regional parlamentaria deberá tomar una postura y optar por una propuesta para interceder y pedir que sea asumida por el Ejecutivo. Al respecto, el congresista de Avanza País, Juan Burgos, manifestó en la referida reunión del viernes que “eso (esperar el laudo) va a significar cinco años más de retraso para la construcción de la presa Palo Redondo”.
Por su parte, el legislador Diego Bazán se mostró a favor de la propuesta de los empresarios. Sostuvo que “todo es posible si el presidente de la República toma la decisión. Esa es la más rápida, porque si esperamos que se dilucide el laudo arbitral no vamos a llegar a algo y vamos a extender por cinco años el tema”.
Mientras, el presidente de la Comisión de Presupuesto del Congreso, Héctor Acuña, sostuvo días previos a un medio local que el presupuesto General de la República 2022 no contempla presupuesto para la reactivación de Chavimochic, pero que de regularizar su tema legal el proyecto accedería inmediatamente a recursos comprometidos por la CAF – banco de desarrollo de América Latina, financiamiento que permitiría concluir Palo Redondo.
La propuesta privada se muestra como la más favorable y rápida para destrabar Chavimochic. Ahora todo queda en manos de los decisores estatales contemplando las ventajas laborales, económicas e hídricas que implica esta alternativa frente a lo que significaría iniciar un nuevo proceso si se tiene al laudo arbitral como única opción.
