El último viernes, la presidenta Dina Boluarte visitó la provincia de Virú, en La Libertad, donde rubricó no solo el documento para poner en marcha la tercera etapa del proyecto Chavimochic, sino también se acuñó el calificativo de «Yo soy la madre del Perú».
Todo se desató cuando Boluarte tomó la palabra frente a los asistentes y se despachó en una andanada de halagos no solo sobre ella misma, sino también respecto del gobernador regional César Acuña de quien dijo es «el papá de La Libertad».
«Seguiremos ingeniero Acuña, gobernador de La Libertad, abrazando los sueños y la esperanza de su pueblo que lo eligió. Usted es el papá de La Libertad, soy la mamá de todo el Perú,y juntos avanzaremos para poder conseguir los sueños y la esperanza de nuestras hermanas y hermanos», expresó Dina Boluarte.
La frase, sin embargo, no es reflejo de la realidad. La última encuesta de Ipsos apenas le otorga el 8% de aprobación a Dina Boluarte y un 83% de desaprobación. Y, respecto de Acuña, su gestión es muy criticada debido a su falta de compromiso para enfrentar la inseguridad ciudadana la región, además de las promesas que prometió cumplir y que aún se mantienen en espera.
La frase que lanzó Boluarte fue tan ocurrente que hasta el mismo Acuña, acostumbrado a dejar «reflexiones» para la posteridad, soltó a reír y hasta a apaludir jocosamente.
Este cómico episodio marcó la imponente ceremonia sobre las negociaciones del contrato entre Perú y Canadá para la realización de la tercera etapa Chavimochic, que generará más de 150 mil nuevos puestos de trabajo en la región.
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