La Municipalidad Provincial de Trujillo atraviesa una crisis de gobernabilidad por los constantes cambios de funcionarios que ha realizado el alcalde Arturo Fernández Bazán en los primeros cinco meses de su gestión. Solo el viernes pasado, renunciaron o fueron cesados tres gerentes y una subgerenta, entre ellos el encargado del Plan de Desarrollo Territorial.
El burgomaestre confirmó la salida del gerente de Desarrollo Urbano, Carlos Vejarano Celis, a quien acusó de no informar de su trabajo y de tener vínculos con regidores del partido político Alianza para el Progreso (APP). Fernández Bazán dijo que en esa área habría irregularidades en la entrega de habilitaciones urbanas.
También dejaron sus cargos el gerente de Desarrollo Económico Local, Diego Davelois Atac, y la subgerenta de Edificaciones, Patricia Suárez Nazar. Con estos, ya suman 44 los cambios que ha realizado la gestión de Arturo Fernández en estos cinco primeros meses de gestión.
El regidor Jorge Vásquez criticó la inestabilidad en la administración edil y señaló que la municipalidad se encuentra entre los últimos en ejecución presupuestal. Vásquez pidió al alcalde que convoque a un diálogo con las fuerzas políticas y sociales para buscar soluciones a los problemas de la ciudad.