Directiva del Club Libertad tomó decisión tras declaraciones de alcalde Arturo Fernández de no otorgar licencia para escenarios del evento por considerar que familia Burméster se aprovecha de danza que es patrimonio nacional.
REDACCIÓN INVESTIGA
Cuando Trujillo esperaba volver a vivir la fiesta de los pañuelos, luego de 3 años de suspensión por la pandemia de la covid-19, el directorio del Club Libertad, ente organizador del evento desde hace 63 años, anunció su decisión de trasladar la tradicional fiesta a Lima. El motivo: las declaraciones del nuevo alcalde de Trujillo quien advirtió que no otorgaría la licencia a los escenarios que se usan para el evento.
“En reiteradas y determinantes declaraciones cargadas de falsedades, agravios e ignorancia, el alcalde de Trujillo ha precisado que no permitirá la realización del 63 Concurso Nacional de Marinera en nuestra ciudad. Ante este hecho ilegal, arbitrario y que constituye además un flagrante caso de abuso de autoridad (…), el Directorio del Club Libertad informa que este evento de reconocimiento mundial se desarrollará en la ciudad de Lima, del martes 24 al domingo 29 de enero próximo, en lugares y horarios a indicarse en los días siguientes”, informó esta noche el ente organizador en un comunicado.
“A los amigos que están en la marinera, yo mismo voy a fiscalizar las licencias porque no es justo que una familia se esté, digamos, aprovechando de la marinera que es un patrimonio nacional. La marinera no le pertenece a una familia. ¿Cuánto se gasta para que una familia, un solo individuo un solo ciudadano esté viendo una semana la marinera? Ochocientos soles, casi un pasaje a ecuador con todo pagado y viáticos. Además, para mí no sirve la marinera, es trucha porque la misma gente que ha estado de jurado ha hecho que esos concursos son truchos; si tienen plata, tienen opción a pasar a la final. Así que a todos los Burméster decirle que aquí no voy a permitir un solo evento del Club Libertad, que le pertenece a los trujillanos. Yo voy a hacer todas las gestiones para que el patrimonio no sea no sea de un solo grupo de familia”, manifestó el alcalde Arturo Fernández horas antes de la decisión del Club Libertad.
Los organizadores del concurso hicieron referencia, también, al perjuicio económico que la decisión de la autoridad municipal ocasionará a la economía local y en especial a los micro y o pequeños emprendedores y empresarios independientes, así como a los turistas. “Se verán, sin duda, seriamente afectados sus negocios, extendiéndose este perjuicio, además, a los miles de turistas nacionales y extranjeros que tienen previsto con bastante anticipación visitar nuestra ciudad”.
El Concurso Nacional de Marinera es organizado desde hace 63 años por el Club Libertad que mantiene con la Municipalidad Provincial de Trujillo un largo proceso judicial por la propiedad del área que ocupa el ente privado en el centro histórico. En dos instancias ya el Poder Judicial resolvió que la propiedad del inmueble es de la Beneficencia Pública de Trujillo, sin embargo, está aún se mantiene en manos de la familia Burméster que dirige el Club Libertad.