Cuatro estudios presentados por la organización CHS Alternativo exponen las condiciones de explotación laboral que enfrentan los pueblos indígenas awajún, tikuna y matsé en Loreto.
Estas investigaciones detallan como las comunidades se ven involucradas en actividades ilícitas como la minería ilegal, tala de madera y narcotráfico, con consecuencias devastadoras para sus derechos y bienestar.
En las zonas donde se desarrolla la minería ilegal de oro, particularmente en el distrito de Manseriche, los explotadores logran generar más de 12 millones 750 mil soles mensuales. Este movimiento económico contrasta con la mínima remuneración que reciben los indígenas awajún que, bajo condiciones de explotación o trabajo forzoso, ven vulnerados sus derechos.
En palabras de Ricardo Valdés, director ejecutivo de CHS Alternativo, “Cómo combatir un negocio que en territorios específicos de Loreto genera para los explotadores ganancias de más de 12 millones de soles mensuales, según se estima en la investigación sobre la extracción ilegal de oro en Manseriche, mientras que el Estado solo dispone de poco más de 5 millones al año para prevenir y perseguir el delito y atender y reintegrar a las víctimas en todo el país”.
Estudio sobre la madera ilegal y su impacto en los matsés
Uno de los informes titulado «La madera ilegal y el trabajo forzoso entre los matsés» describe cómo la tala ilegal de madera en la jurisdicción de Requena afecta gravemente a esta comunidad.
Desde una temprana edad, los matsés son involucrados en la cadena productiva, desempeñándose principalmente en la extracción y el transporte de madera. A pesar de ello, no tienen control ni participación en la comercialización del producto final.
El estudio estima que los patrones pueden obtener ingresos de 50 000 soles por cada 100 piezas de madera extraída, mientras que los trabajadores indígenas apenas reciben una fracción de ese valor.
Narcotráfico y trabajo forzoso entre los tikuna
El narcotráfico también genera un escenario de explotación entre los pueblos indígenas. En la región de Mariscal Ramón Castilla, los tikuna, involucrados en la cosecha de hojas de coca, enfrentan condiciones precarias.
El estudio “Narco, gobernanza, trabajo forzoso y los Tikuna” evidencia que los trabajadores reciben S/ 1.00 por cada kilo de hoja de coca recolectada, mientras soportan intimidaciones y amenazas para cumplir con las cuotas impuestas por los narcotraficantes.
Además, el narcotráfico en el Perú genera más de 1280 millones de dólares al año, convirtiendo a las comunidades indígenas en víctimas silenciosas de este lucrativo negocio. Los testimonios recogidos en la investigación detallan que los tikuna son amenazados con armas de fuego y en ocasiones con el asesinato público como forma de control y amedrentamiento.
Explotación sexual y doméstica de mujeres indígenas
El último informe, «Trabajo forzoso sexual y doméstico en mujeres indígenas», revela cómo las mujeres indígenas en Loreto son sometidas a diversas formas de explotación, tanto sexual como doméstica.
En este contexto, se estima que los ingresos derivados de la explotación sexual de una víctima pueden alcanzar los 16 320 soles mensuales, lo que muestra la magnitud de este delito en la región.
Valdés finaliza señalando que: “Preocupa que no sea visible que esa explotación se sustenta en otra explotación: la de personas de origen indígena, con lo cual se está continuando con un proceso histórico que debe ser estudiado y asumido, como lo han realizado algunos países”. Descarga los informes aquí.
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